Artillería (MAQ)

De Wikisource, la biblioteca libre.
Nota: En esta transcripción se ha respetado la ortografía original.

ARTILLERÍA.

Bien hayan aquellos benditos siglos que carecieron de la espantable furia de aquestos endemoniados instrumentos de la artilleria, á cuyo inventor tengo para mí que en el infierno se le está dando el premio de su diabólica invencion, con la cual dió causa que un infame y cobarde brazo quite la vida á un valeroso caballero, y que sin saber como ó por donde, en la mitad del corage y brio que enciende y anima á los valientes pechos, llega una desmandada bala, disparada de quien quizá huyó y se espantó del resplandor que hizo el fuego al disparar de la maldita máquina, y corta y acaba en un instante los pensamientos y vida de quien la merecia gozar luengos siglos. [1]

  1. Aun cuando se conceda que el descubrimiento de las armas de fuego ha ahorrado mucha sangre en las batallas, no es menos cierto que, como dice nuestro autor, sea el mas valiente víctima del mas pusilánime, que no hubiera osado á habérselas con él cuerpo á cuerpo. Tan horrenda es la invencion de la artilleria, que ha exaltado constantemente la fantasia de los grandes ingenios. Cervantes supone á su inventor en el infierno pagando la pena de su invento; Milton en su poema lo atribuye á los mismos espíritus infernales.